Second Best Norse coach of Blackbox
10th Best Orc coach of Blackbox


SANGRE VERDE. Diario de prensa deportiva orca.

Por fin ha empezado la liga chicos, y no podía haberlo hecho mejor. Nuestro único equipo orco, “Verdez y Guapoz”, se enfrentó, por primera vez, a un equipo de hombres lagarto. Todos especulaban sobre el rendimiento del equipo orco; había muchos fichajes de última hora y no parecía haber mucha conexión entre sus miembros.
Sea como fuere, el partido se inició con expectación; aproximadamente 22000 espectadores acudieron al partido, de los cuales más de 17000 eran hinchas de los hombres lagarto, según fuentes oficiales.
Por fin sonó el pitido que daba comienzo al partido. Tanto los saurios como los eslizones sorprendieron a la línea orca y derribaron a muchos jugadores. El equipo orco supo rehacerse; bueno, todos menos uno... Mágar, que se entretuvo hurgándose la nariz mientras dos saurios le golpeaban hasta derribarle. Skraght, que al final del partido fue galardonado como el mejor jugador del equipo, se hizo rápidamente con el balón y esquivó por milímetros la daga de un kamikace eslizón que había conseguido escabullirse entre la defensa orca. Poco a poco, el equipo orco empezó a pegar duro. Fire Runner causó la primera baja de la liga al romper el cráneo de un osado eslizón que pasó demasiado cerca. Mientras, varios eslizones eran arrastrados hasta las bandas y finalmente empujados hacia la multitud; un eslizón desapareció tras ser brutalmente zarandeado por los hinchas orcos ( se rumorea que ha muerto ).
A pesar de la inferioridad numérica, los hombres lagarto siguieron luchando con ferocidad y haciendo que varios orcos mordieran el polvo. Uno de los culpables de esta ferocidad fue el Kroxigor, que estuvo fantástico durante todo el partido. Afortunadamente, nuestros chicos seguían levantándose.
Mágar seguía tendido en el suelo ( estuvo así unos 20 minutos ) con una estúpida sonrisa de felicidad en la cara. Era una imagen triste, la mayoría de los espectadores opinan que está demasiado gordo como para levantarse por sí mismo, mientras que otros lo achacan al profundo sopor mental del troll.
En muy poco tiempo, el centro del campo desapareció y el juego se concentró en las bandas. Skraght se deshizo del eslizón de la daga y a continuación se le escurrió el balón entre las manos al intentar pasarlo a una distancia de apenas tres metros; muchos saurios del público y la mayoría de los televidentes rieron ante la pésima actuación de “ Ojo Preziozo“. Los hinchas lagartos empezaron a martirizar al nervioso orco coreando una y otra vez la misma canción: < “ ¡ Ojo- Topo ! ¡ Ojo- Topo ! “ >.
Mientras tanto, Silent Dead se enfrascó en una pelea personal con el enorme Kroxigor. El corredor orco se defendió con tenacidad e incluso tuvo la osadía de intentar derribarle pero la lógica se impuso y el Kroxigor acabó tumbando a Silent Dead una y otra vez.

Con el orgullo herido, el lanzador orco recogió el balón y esta vez realizó un pase certero dirigido al eléctrico Fire Runner. Éste, nada más recibir el balón, salió disparado en dirección a la línea de touch-down. Los hinchas orcos rugieron al ver cómo el corredor orco anotaba un touch-down y se lo dedicaba al público.
Antes de reanudar el encuentro, el árbitro expulsó al eslizón que había utilizado la daga. El público entero, incluido los orcos, abuchearon la decisión (¡ eso es parte del juego !). Los hombres lagarto jugaban ya con dos jugadores menos y los orcos no habían sufrido ninguna baja.
Se reanudó el encuentro y los Saurios volvieron a demostrar se tenacidad. Entre varios de ellos golpearon al Gordo, que cayó pesadamente sobre el terreno de juego totalmente inconsciente, acentuando aun más su pésima actuación.
Terminó la primera parte y el Gordo seguía sin levantarse, así que prácticamente todo el equipo orco tuvo que colaborar para arrastrar al troll fuera del campo.

En la segunda parte, los hombres lagarto concentraron acertadamente su juego por el centro. Un eslizón demasiado grácil controlaba el balón rodeado de compañeros en busca de un hueco por donde poder salir disparado... pero no había huecos. Orcos y más orcos caían al suelo, pero haciendo gala de su innata resistencia, volvían a levantarse. Mientras, el Kroxigor seguía haciendo de las suyas y no parecía tener demasiados problemas luchando contra dos orcos al mismo tiempo.
Lamentablemente para el equipo reptiliano, el orco Negro Morko esquivó torpemente a un adversario y se lanzó sobre el distraído eslizón que poseía el balón. La criatura cayó tras recibir una poderosa patada en el estómago. El balón rebotó en muchos jugadores pero ninguno fue capaz de cogerlo. El grácil eslizón se levantó dolorido y realizó una sucesión de movimientos perfectos para recuperar el balón. El lagarto recogió el balón con una elegancia extrema ( han repetido los movimientos hasta la saciedad en la CNB ) y volvió a refugiarse entre sus compañeros. Esta vez eran los hinchas hombres-lagarto los que chillaban enloquecidos ante el movimiento del pequeño eslizón; la remontada parecía posible.
La esperanza desapareció en el momento en que Fire Runner descargó un rápido puñetazo en la nuca del eslizón... el balón estaba de nuevo en el suelo.
Deseoso de limpiar la pobre imagen mostrada en la primera parte, Skraght recogió con rapidez el balón y salió corriendo de nuevo por la banda izquierda.
Mientras Fire Runner sonreía por su acertado golpe, un saurio le golpeó con tal fuerza que le propulsó tres metros. Tras caer, el corredor orco no se movía y se temió por lo peor, pero en realidad el joven jugador orco estaba inconsciente.
Skraght seguía corriendo a toda velocidad mientras Stinki cubría su carrera. Los golpes se siguieron sucediendo y ya eran varios los hombres lagarto que estaban tirados en el suelo.
Un inteligente saurio intentó alcanzar al orco pero no lo consiguió. "Ojo Preziozo" marcó por fin el touch-down y se quedó mirando a las cámaras con una expresión indiferente. El partido finalizó minutos después.

Amigos, esto es Blood Bowl.