“Partido de liga en el que se han enfrentado el equipo goblin “Pow doce doce” y los elfos oscuros “La Sonrisa de Arlequín”. Antes de comenzar el encuentro, los goblins han fichado en el último momento a Fungus el chiflado, que estaba por ahí con su bola con cadena, además, se han hecho con un par de sobornos por si han de incentivar a los árbitros.
El partido comienza con los “Pow doce doce” realizando un blitz que pilló totalmente por sorpresa a los elfos oscuros, posicionados para intentar marcar pronto y así protestar al árbitro por la cantidad de armas introducidas por los pequeñajos en el terreno de juego. Cazalilla comenzó dejando KO aun blitzer de los oscuros con su motosierra mientras, al otro lado del campo, comenzaban a caer bombas, llevándose por delante a Freya, una de las líneas.
Tras unos primeros momentos de desconcierto, los elfos oscuros consiguieron hacer un hueco por banda izquierda y, pese a que el resto del campo era controlado por los goblin, una carrera de Le Malemort, seguida de un pase, permitieron a Azrael anotar el primer touchdown en su segundo turno; lo más importante de esta acción es que el árbitro, mientras volvía al centro del campo vio la motosierra de Cazalilla y lo expulsó inmediatamente, aunque el resto de jugadores continuaron en el terreno de juego, ya que las voces (y el dinero que cambió de manos) de su entrenador consiguieron que el equipo arbitral mirara para otro lado.
Con los fanáticos avanzando como auténticos locos dando bolazos sin parar, lo cual provocó la lesión de Chuche, y con los elfos centrados en eliminar a Neo_chains, el bombardero, los “Pow doce doce” se lanzaron al ataque, y Ayumu mató a Alexander, un línea elfo contratado para el partido. Para desgracia de los “Pow doce doce” Lordillo, uno de los troll, comenzó a mirar a una mariposa que pasaba por allí, circunstancia que fue aprovechada por Nadia, una línea elfa con aptitudes de blitzer, para escapar de los goblin que la rodeaban y placar al portador del balón, haciéndole morder el polvo. En ese momento casi todos los jugadores se lanzaron hacia el balón intentando atraparlo mientras este rebotaba. Le Malemort comenzó a correr la banda, mientras, en medio del barullo, uno de los fanáticos provocó que el balón saliera de la melee, circunstancia que fue aprovechada por Ciro para acabar con la vida de Ayumu: gracias a ello Azrael logro recoger el ovoide e intentó realizar un pase tras zafarse de Exting, el fanático, pero en esta vida no todo es intentarlo… aun así, la bruja estaba cerca del lugar en que fue a parar. Los fanáticos siguieron dando golpes y Lordillo por fin espabiló, lanzándose sobre un línea. Por desgracia para su equipo ambos fueron al suelo provocando un cambio de turno que fue aprovechado por la bruja para coger el balón, y marcar el segundo touchdown de los elfos en su turno 8. Tras esto, los árbitros decidieron expulsar a todos aquellos que llevaban objetos prohibidos por los organizadores de la liga.


La segunda parte comenzó con una patada inicial horrorosa por parte de los elfos oscuros, que mandaron el balón directamente a la grada. Los goblins comenzaron a organizar su ataque, mientras “La sonrisa de Arlequín” cerraba los huecos temiendo que alguno de los troll lanzara a uno de los pequeñajos y marcaran de esa manera. El juego discurría de una banda a otra, mientras los goblins impedían cualquier posibilidad de acercamiento a su ball carrier. Sin embargo, una expulsión a Samsy por hacer una falta a uno de sus contrincantes, provocó que los elfos se lanzaran a la captura del balón, consiguiendo hacerse con él la bruja que, por el rabillo del ojo, miraba como uno de sus blitzer corría hacia la zona de anotación. Tras varios placajes con los que consiguieron dejarla justo al lado de la línea de banda, desde donde el público intentaba tirarla de los pelos, logró, con ayuda de Frankencuchi, salir corriendo y pasar a su compañera Lily, la cual marcó sin oposición en su turno 5.
Los goblins lo prepararon todo para marcar mediante el lanzamiento de uno de los suyos, sin embargo Lordillo (otra vez él) lo tiró contra el suelo, matándolo en el acto y dejando el balón a los pies de uno de los blitzer elfos, quién lo cogió y salió corriendo como alma que lleva el diablo. Ya en el turno 8, Garfunkel, el troll, logró matar a Ciro, el blitzer que le había dado muchos problemas durante el partido, pero la rápida intervención del médico lo volvió a traer a la tierra de los vivos. Sin tiempo para más, los elfos anotaron su cuarto tanto en su turno 8, con lo que finalizó el partido.
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