Vicentín es, en pocas palabras, un gambitero que nunca para por casa. Por algo está considerado el tío más marchoso del medio Levante español. En su interior hay cosas abstractas, hay colores, luces y sonidos. "Oigo voces", reconoce. "Unas me dicen non-stop y otras por contra me dicen que nunca es suficiente, que ciego siempre, ciego siempre, ciego siempre". Y es que Vicentín tiene dos pasiones, Chimo Bayo y la química, pero no la del Quimicefa, sino la otra, la de colorines.
Su leiv motiv es ir siempre a tope hasta que aguante la maquinaria, y sus frases favoritas son: "No te digo nada y te lo digo todo" y "Hola pataliebres, como lleváis la maquinaria". Sus mejores amigos son El Rulas y Piruleta.